Un grupo de turistas chinos (el tipo con la bandera es el guía turístico)
El año pasado pasé algunos meses en Chiang Mai, Tailandia. Pero parece que China me sigue a todas partes. O al menos, ésta es la impresión que me dio: había turistas chinos en cada esquina, cada restaurante y cada cafetería.
La invasión china de Chiang Mai
¿Por qué Chiang Mai se hizo tan popular entre los turistas chinos? Parece que es debido a «Lost in Thailand«, una película muy popular en China (la versión china de «Resacón«, con menos drogas y más kung fu).
Teorema: Como «Lost in Thailand» fue filmada en Chiang Mai, casi cualquier chino con un pasaporte va a visitar el norte de Tailandia, en los próximos dos años.
Corolario: Los habitantes de Chiang Mai están molestos con los turistas chinos. Tan molestos que la Universidad de Chiang Mai ha empezado a cobrar una «cuota de visita» a las hordas de turistas chinos que llegan todos los días. Aquí cito un extracto del artículo que informa de la noticia:
«Among the more bizarre incidents is Chinese tourists dressing up in the university students′ uniform and taking pictures with the university landmarks, Mr. Rome said, adding that the security guards detained four such tourists yesterday during their cosplay activity.»
Para los alérgicos al inglés:
«Entre los incidentes más bizarros con los turistas chinos están vestirse con el uniforme de los estudiantes universitarios y tomarse de fotografías con los lugares emblemáticos de la universidad, dijo el señor Roma, y añadiendo que los guardias de seguridad detuvieron ayer a cuatro de estos turistas durante su actividad cosplay.»
Este es sólo uno de los muchos ejemplos que he podido encontrar en la web.
Espera un minuto…
«¿Los Thai molestos con los turistas?»
Esto me suena como una contradicción, porque una gran parte del PIB de Tailandia se basa en el turismo y, en general, los tailandeses parecen ser muy amables con los extranjeros.
¡A menos que los extranjeros sean chinos, he descubierto!
Declaración de intenciones: Todo lo que viene a continuación se refiere a los turistas chinos que viajan en un viaje organizado. Los chinos que viajan por su cuenta pertenecen a una clase totalmente diferente de turistas, probablemente la mejor, ya que no van a los clubs y se ponen hiperborrachos (hobby más popular entre los turistas occidentales que visitan Tailandia, después de buscar prostitutas, claro), son extremadamente amables y gastan un montón de dinero.
¿Estoy sorprendido por este descubrimiento?
No, en absoluto! Yo ya había notado que los chinos que viajan en grupo son, en términos generales, muy desagradables, sucios y ruidosos (sí, más que los cerdos italianos como yo). Un dolor de huevos. Un jodido tsunami.
¿Cuando hice este descubrimiento? Una semana después de aterrizar en China, mientras visitaba el Lago Oeste de Hangzhou. Sí, es en China que vas a encontrar los peores turistas chinos, los que nunca viajaron antes, hacen un recorrido en Beijing o en el Lago del Oeste y piensan que pueden comportarse como lo hacen en su pueblo rural: fumar, gritar, comer, escupir y tirar basura por todas partes (y todo al mismo tiempo).
A modo de ejemplo, la última vez que tomé el vuelo Shanghai-Hong Kong tuve la gran suerte de compartir el avión con cuarenta turistas procedentes de Mongolia Interior (norte de China). Todos ellos estaban viajando juntos y, muy probablemente, era la primera vez que iban «al extranjero» (aunque Hong Kong es una provincia china, es una zona administrativa especial y hay que cruzar una frontera como si se fuera a otro país) .
A parte del follón en el avión, que después de aterrizar parecía un basurero, el episodio más divertido del viaje fue durante la espera en el aeropuerto de Hong Kong para el control de pasaportes. Ya sabes, una de esas colas llenas de hombres de negocios elegantes y tímidas chicas de Hong Kong que miran a su iPhone mientras que un silencio sepulcral invade la sala.
Puedo garantizarte que, el día que la horda de turistas de Mongolia Interior llegó, no había mucho silencio. Empezaron a sortear a los viajeros que estaban delante de ellos en la cola mientras que dejaban una estela de basura a su paso, gritando y, por supuesto, comiendo patas de pollo y otras mierdas. Uno incluso encendió un cigarrillo Yun Yan. Las mujeres de la policía fronteriza de Hong Kong trataron de detener a los bárbaros, pero no había nada que hacer: no escucharon y agrupándose todos juntos en frente del mostrador de control de pasaportes.
En realidad, nadie se quejó. Todo el mundo (la policía de Hong Kong, los demás viajeros chinos y los hombres de negocios internacionales) entendían lo que estaba pasando y todo el mundo pensaba lo mismo: vamos a dejarlos irse tan rápido como sea posible, ya que es mucho más fácil ignorar su conducta primitiva que tratar de hacer algo al respecto.
Debo admitir que fue bastante divertido y que este follón es uno de los aspectos de China, que más echo de menos cada vez que me voy. Pero debo ser una persona rara: la mayoría de la gente no china no puede soportar este comportamiento.
¿Cuál es la razón de este comportamiento?
Como he dicho al principio de este artículo, los chinos que viajan solos son completamente diferentes. Mi opinión es que tienen buena educación, hablan al menos un poco de Inglés y, en general, saben cómo comportarse fuera de su pueblo rural de la provincia de Shandong o su barrio al norte de Shanghai.
Por otra parte, los chinos que toman un viaje organizado casi seguro no hablaban nada de inglés y tienen cero interés en conocer más sobre otras culturas. Tomando un viaje en grupo les permite viajar sin cambiar sus hábitos: pueden seguir siendo maleducados con las camareras o empleados (en China que está socialmente aceptado), tirar basura en todas partes (en China hay ejércitos de «recolectores» de basura que «siguen» a los turistas y limpian el lugar, pero el resto del mundo es diferente), fumando todo el tiempo (china es el único lugar del mundo en el que veo a la gente fumando en el aeropuerto, fuera de la sala de fumadores), gritando en el teléfono, escupiendo en el suelo, y así sucesivamente. La lista es bastante larga!
Esto explica por qué en París -también en muchas otras ciudades- hay restaurantes chinos «secretos», especialmente construidos para los viajes organizados que llegan desde China.
Los turistas se toman una foto en frente de la Torre Eiffel y luego van directamente a estos «bonitos» restaurantes donde puede comer la misma comida que en Beijing o Shanghai. Es posible que no me creas, pero tal vez creas a Evan Osnos, que publicó un artículo fantástico, «The Grand Tour: Europe on fifteen hundred yuan a day«, que describe el comportamiento de los grupos de turistas chinos en Europa (se unió a un tour antes de escribir el ensayo). Aquí una breve cita tomada del articulo:
«We followed Li into a small Chinese storefront, down a flight of stairs, and into a hot, claustrophobic hallway flanked by windowless rooms jammed with Chinese diners. It was a hive of activity invisible from the street, a parallel Paris. There were no empty seats, so Li motioned for us to continue out the back door, where we turned left and entered a second restaurant, also Chinese. Down another staircase, into another windowless room, where dishes arrived: pork braised in brown sauce, bok choy, egg-drop soup, spicy chicken.»
eh aquí mi traducción al español:
«Seguimos a Li en una pequeña tienda China, por un tramo de escaleras, y por un pasillo abrasador y claustrofóbico, flanqueado por salas sin ventanas atestadas con los comensales chinos. Un hervidero de actividad invisible desde la calle, un realidad de París paralela. No había asientos vacíos, por lo que Li hizo un gesto para que continuáramos hasta la puerta trasera, donde doblamos a la izquierda y entramos en un segundo restaurante, también chino abajo de otra escalera, en otra habitación sin ventanas, donde llegaron los platos: carne de cerdo braseado en salsa marrón, col china, sopa de huevo, pollo picante.»
Entonces ¿por qué viajan?
Si ellos no quieren aprender nada acerca de otras culturas, conocer gente diferente, probar nueva comida o hacer cualquier cosa que ya hacen en China, ¿por qué diablos quieren viajar al extranjero?
Cara («orgullo»).
Ganan cara entre su círculo social: estar en Roma o París es un poco como mostrar un Picasso en tu sala de estar. Como no pueden permitirse un Picasso, toman un tour de doce días en Europa, para que, en menos de dos semanas, puedan tomar fotos en Frankfurt, París, Niza, Venecia, Florencia y Roma. ¡Impresionante!
Pig on the loose: Chinese Tour Groups
Si estás interesado en saber más sobre este tema puedes leer Pigs on the Loose: Chinese Tour Groups, un breve ensayo escrito por Echo Wang, una china que viajó por todo el mundo y, avergonzada por el comportamiento de sus compatriotas, decidió escribir un manifiesto en contra de los chinos que viajan en tours de grupo.
Photo Credits: Photos by Sapore di Cina